Decía mi abuela que se menciona el pecado pero no al pecador. Y es cierto, porque al final, lo que en un momento dado resulta desagradable acaba convirtiéndose en la anécdota que se recordará durante meses, o años, y será constante motivo de pullas (leer correctamente, que he puesto una "u"), risas y bromas, además de incluir en la lista de
mmm..., me lo pienso a Fulano o Mengano.
Hoy es un día de esos. Después de algunas contradicciones previas hicimos acto de presencia en nuestro destino. Vamos, que nos dimos un buen paseo. ¡Fuerte calor hacía! Anduvimos un rato por aquellos lares hasta que el Club decidió recoger bártulos y levantar el vuelo en busca del merecido almuerzo (es que no sabemos estarnos quietos). ¡Para qué fue aquello!
Rumbo, a nuestro restaurante, por allí
pa'rriba, con ganas de disfrutar de una buena comida para 24 personas, el Club demostró de lo que es capaz. Y es el que el Club no se anda con chiquitas... con chiquita clavada... a 18 euros por persona. Juro que oí llorar a algunas carteras (¡jajaja!). El día se estaba cociendo a fuego lento, dando sus frutos, otorgando alegrías, no sé si se entiende la ironía.
Y es que no siempre cuando se organiza una salida (
salida, de ruta, de paseo, no pienses mal), salen las cosas como uno desea. ¡Qué se le va a hacer!
Sin embargo... nunca se perdió el buen humor, las bromas, la buena amistad, la convivencia. Cada uno tiene su opinión sobre ésto o aquello, pero con vicisitudes incluidas, el Club hace honor a su filosofía,
un club de amigos que comparte una afición común por el automóvil clásico.
Memorables los niños de las comuniones, y sus padres, alrededor de los coches, allí donde paramos. Memorable la vieja Derbi con kit de Derbi Coyote, conocida también como
Platanera, sobre una de nuestras furgonetas Volkswagen. Memorable que nunca faltó un chiste o una broma para hacernos reír a todos.
¡Qué no decaiga nunca ese espíritu, la buena broma, la fiesta y la diversión! Es lo mejor que se puede cultivar, es nuestro
tesooorooo...